La Atlántida (2ª parte)

Como vimos anteriormente, numerosos arqueólogos encontraron diversos elefantes esculpidos en los edificios mayas; elefantes cuya existencia no se encontraba aún en América, pero sí en la Atlántida según los escritos de Platón.
Recordemos además que se encontró en el mar del Caribe dos hileras de rocas separadas por una distancia perfectamente regular.
No obstante, aquellos elefantes de los edificios podían representar guacamayos, y las hileras de rocas podría ser una maravilla creada por la naturaleza.

Pero, ¿qué veremos en esta segunda parte de la Atlántida?

En junio de 2002 se descubrió una gruta submarina cerca del golfo de México, llena de una gran cantidad de objetos en perfecto estado y de esqueletos humanos. Se realizaron pruebas mediante radiocarbono y se averiguó que los esqueletos tenían entre ocho y trece mil años de antigüedad, más antiguos que los pueblos clovis, conocidos como los primeros pobladores del continente americano.
El antropólogo George Erikson cree que estos restos humanos de cráneo dolicocéfalo y rostro alargado, corresponderían a los supervivientes de la Atlántida. Todo encaja para este antropólogo para defender dicha postura: un esqueleto de más de diez mil años de antigüedad con rasgos sin parecido alguno a los primeros nativos americanos; esculturas de razas no presentes en América de hace dos mil años; antiguos hombres con barba y bigotes, cuando los mayas no tenían vello facial.

No obstante, la aparición en esculturas de hombres con vello facial puede deberse a la representación de los dioses.
Por otro lado, como respuesta al cráneo dolicocéfalo, decir que en diversas culturas y/o civilizaciones, al igual que el alargamiento del cuello o las dilataciones de los lóbulos de las orejas, el alargamiento craneal es visto como gusto estético y seductor.

¿Realidad o fantasía? Juzguen ustedes mismos.

(Dedicado a todos nuestros amigos y amigas de latinoamérica)

1ª Parte: www.ojosdenadie.blogspot.com/2011/01/la-atlantida-1-parte.html
3ª Parte: www.ojosdenadie.blogspot.com/2011/01/la-atlantida-3-parte.html